EL CONSEJO DE MINISTROS AUTORIZA POR FIN LA CONTRATACIÓN DE LA OBRA POR 28 MILLONES
La Autoridad Portuaria de Bilbao ha recibido, por fin, la luz verde ministerial para proceder a contratar las obras de la ampliación de la dársena vasca en el muelle AZ-1, una obra presupuestada en cerca de 29 millones de euros que permitirá ganar 50.000 metros cuadrados de superficie y 231 metros de muelle para atraque de buques.
En concreto, el Consejo de Ministros español autorizó, en su reunión de ayer, martes, al Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (Mitma) la contratación de las obras para la prolongación del muelle AZ-1 del puerto exterior bilbaino, por un importe de 28.819.736 euros, sin incluir el IVA, y un plazo de ejecución de 18 meses.
Como se recordará, el citado proyecto tenía que haberse puesto en marcha el pasado año 2020 dado que el puerto de Bilbao ya había hecho todos los deberes, contaba con la autorización medioambiental y el permiso del ente público Puertos del Estado, pero una nueva normativa administrativa que obliga a pasar la autorización de este tipo de obras por Consejo de Ministros ha retrasado la puesta en marcha de la iniciativa y ha vuelto a poner sobre la mesa la idoneidad del sistema de funcionamiento del sistema portuario español.
En todo caso, la inversión será una realidad en los próximos meses. Se espera que la licitación esté en unos tres meses de forma que las obras puedan iniciarse en setiembre.
El proyecto consistirá en la construcción de 251 metros de cantil de nuevo muelle, 231 metros de longitud serán los correspondientes a una nueva línea de atraque, lo que permitirá crear una nueva superficie para proyectos empresariales de 50.000 metros cuadrados más de explanada. Técnicamente, la obra se llevará a cabo mediante el fondeo de 6 cajones de hormigón con su correspondiente superestructura, conservando la sección tipo del muelle AZ-1, y a su finalización, la Autoridad Portuaria de Bilbao ganará 49.760 metros cuadrados de explanada adosada al muelle.
Dicha superficie estará protegida de los efectos del oleaje del Cantábrico, –algo que, según los operadores de los buques en el puerto vasco, dificulta significativamente la operatividad portuaria de esta infraestructura–, mediante la construcción de un dique en talud perpendicular al muelle AZ-1.
Para ello, el Centro de Estudios y Experimentación de Obras Públicas (CEDEX), del Ministerio, ha realizado las pruebas e informes que confirman la reducción de forma significativa de los niveles de agitación de oleaje que afectan a la dársena sur.
El proyecto se encuadra en la denominada ampliación del puerto de Bilbao en el Abra Exterior y, según la Autoridad Portuaria vizcaina, pondrá a disposición de los operadores una nueva infraestructura portuaria y mejorará sustancialmente la operatividad en términos de eficiencia de la dársena sur
Poco a poco, el puerto vasco, y sus operadores, intenta recuperarse del pésimo año 2020, –el tráfico de mercancías cayó un 16,5% hasta 29,5 millones de toneladas–, marcado por la crisis económica derivada del covid y por la huelga de los estibadores, cuyo conflicto sigue sin cerrarse en firme lo que no ayuda a captar tráficos.
TORO Y BETOLAZA
Pese a todo, empresas vascas siguen apostando por la inversión. Este es el caso de Consignaciones Toro y Betolaza que ha solicitado a la Autoridad Portuaria de Bilbao la modificación de la concesión de su titularidad en el Muelle A-6 de la Ampliación de la dársena vasca.
Con esta petición, la compañía quiere ampliar la superficie concesional que disfruta en el citado enclave portuario vasco en unos 70.150 metros cuadrados para construir un almacén para carga general de 21.600 metros de superficie.
Fuente: https://www.deia.eus/economia/2021/03/03/luz-verde-ampliacion-az-1/1103311.html
